EL PANICO A LA VEJEZ Y A LA EXHIBICION DE LOS PELLEJOS; HORRORIZA A LOS HUMANOS
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) difundió hace unos días el resultado de las estadísticas en donde se afirma que la demanda de cirugías para el embellecimiento, ha crecido en un 80 por ciento, pues de ese número 80 por ciento son mujeres que oscilan entre los 30 a 60 años de edad. Otros datos del Instituto Nacional de Rehabilitación y el de Cirugía Plástica y Reconstructiva, arrojan datos espeluznantes que rayan en el lujo y la soberbia como son el hecho de que muchas mujeres tienen deslices amorosos (domingo 7 pues), llegan a esos lugares para que sean los especialistas quienes se encarguen de la reconstrucción del himen vaginal, trabajos que tienen un valor superior a los 60 y 80 mil pesos la cirugía. Esta labor, según la fuente consultable en México y principalmente en clínicas de Cirugía y reconstrucción de países sudamericanos, están atiborradas de solicitudes, pues en varios países sin que México sea la excepción, cuantioso número de mujeres de la clase adineradas y otras que corresponden a la clase media, llegan a realizarse las cirugías sobre todo mujeres divorciadas, abandonadas, viudas con la finalidad de reducir la cavidad vaginal. Ahora en cuanto a la reconstrucción por cirugía facial, es un clamor extenso, pues en la actualidad, pareciera que los adultos que sobrepasan los 40 años, tienen un pánico a la vejez y a la exhibición de los pellejos (flacidez en los brazos); casi a todos a los humanos les horroriza las arrugas en el rostro, les malhumora las canas, la gordura y sobre todo, el abdomen abultado y la ausencia total de pompis, acción última que entristece a las damas y las hace caer en un estado depresivo y que en muchas ocasiones las conlleva a la al encierro en su domicilio y finalmente les sobreviene la muerte. El IMSS, alerta sobre esos problemas en particular y precisa que: “Son particularmente las mujeres quienes se encuentran en riesgo al someterse a métodos con personal no calificado, pues se les aplican sustancias peligrosas hasta aceite para bebé o de autos”. La cirugía plástica o estética como es ampliamente conocida, médicos especialistas en la materia confían que: “es una forma de tratar que las personas luzcan menos feas, pero lo que ellas no saben es que las termina haciéndolas mucho más feas de lo que ya eran, además de maximizar sus defectos físicos. Sus caras terminan por hincharse, ponerse moradas o azules como los pitufos y acabar con secuelas de movimiento facial y luego mental “. Los médicos que han demostrado su inconformidad sobre la ausencia de leyes para reclamar esos horrores indica “que prácticamente los doctores quitan huesos que desfiguran caras, hacen cosas indebidas con el paciente que está bajo los efectos de la anestesia, enferman a la gente, las engañan y todo completamente legal”. algunas de las secuelas son las siguientes: Entumecimiento Facial, quiere decir que la cara de la victima, se terminará poniendo como una pasa inmóvil, incapaz de reír, llorar o simplemente hacer otro gesto. Normalmente pasa cuando después de tantas cirugías, los nervios se paralizan volviéndose incapaces de crear cualquier movimiento facial. De tal forma, la cara llega a ponerse tiesa, fea, esponjada, arrugada, espantosa, horrible, terrible, fea, asquerosa, y lo peor es que ese gesto y esa cara la tendrá por mucho y mucho tiempo, o quizás para siempre. La otra secuela es la Obsesión y que consiste normalmente cuando la gente se hace su primer cirugía plástica, la anestesia les afecta las neuronas y terminan por creer que la cirugía mejoro notablemente la cara, cuando lo que en realidad hizo fue empeorarla. Esto ya es una secuela más que física, esto es más psicológico, o sea que ya el paciente tiene otros problemas. Luego de eso, el sujeto termina por hacerse todas la cirugías posibles, sin darse cuenta que cada cirugía que se hace, va empeorando su cara constantemente, hasta que ésta luce como cualquier cosa menos una cara, el rostro llega a ser espantoso, y el sujeto todavía cree que lo ha mejorado como nunca, lo que termina creando lo que conocemos como obsesión. Muerte. Es la peor y la última de todas las secuelas que se pueda tener (por lo menos para el paciente), aunque lo bueno es que ya la gente no tendrá que aguantar ver su horrible cara por todos lados, y ella descansa en paz de tener que cargar con ese horrible y espantoso rostro. Esto es una muy mala noticia para el doctor que seguramente irá merecidamente a la cárcel, por cirugía mal practicada. Así que esto definitivamente no le conviene al doctor, por eso es que se conforman con solo dejarlas espantosas, y ya cuando que el paciente no puede respirar o no puede moverse, simplemente se detiene, por ello le conviene que siga vivo y él sin ningún problema legal, y por supuesto con dinero, mucho dinero. Así es que mejor siga como está, no se pinte el pelo, no se maquille ni se quite ni se ponga cinturones aprieta panza, ni se ponga brazieres con copas de plástico, pues la etapa de la vejez es una de las que realmente siguen posterior a la juventud, y se debe entender que hay que aprovecharse de otras cualidades que tienen los adultos mayores y en cuanto a los feos que quieren verse hermosos o bellos, la naturaleza humana tiene sus límites y si usted no lo cree, solamente analice lo ocurrido con grandes como cantante norteamericano Michael Jackson o el narcotraficante mexicano más famosos, Amado Carrillo Fuentes entre tantos famosos que han muertos en su lucha por esconder el rostro natural, el que les dio la naturaleza.

LAS CALLES DE TUXTLA, SON LA MADRE Y EL EJEMPLO DE LA ANARQUIA
En Tuxtla Gutiérrez, sus calles son el ejemplo preclaro e ilustre de la madre de la anarquía pura debido a las siguientes consideraciones: En la capital, usted puede pasearse en su coche cinco y hasta seis calles del centro hacia sus cuatro putos cardinales y no encuentra un lugar para estacionarse, debido a que en las calles y avenidas encontramos vehículos chatarras que permanecen en esos lugares desde hace ya más de tres años, mismos que son en criadero exacto de zancudos y moscos productores del dengue hemorrágico, también sirve como guarida de malvivientes y vagabundos, menesterosos e indigentes. En las calles de Tuxtla puede observar con toda naturalidad grandes cantidades de objetos que ponen los habitantes para apartar espacios en la vía publica, puede leer infinidad de letreros que indican “no estacione” pero solamente un 10% de ellos pagan el impuesto ante el ayuntamiento municipal, los topes son el platillo de la capital chiapaneca, asimismo el cierre de calles por los mismos ciudadanos como lo que está ocurriendo en la primera norte y 16 poniente. Así es que tenemos un grave problema, pues hacen falta miles de espacios para estacionamiento de vehículos, los pocos que existen son insuficientes y si usted deja su auto después de el perímetro que mencioné, es casi seguro que a su regreso, lo encontrará desvalijado o averiado solo por quitarle el estéreo o lo que es más peor, robárselo. El problema es pues que no existe una autoridad suficiente capaz para poder eliminar todos esos espacios apartados en donde los comerciantes y los habitantes se apoderan de las calles sin que tengan alguna autorización. En Tuxtla Gutiérrez, si hubiera un mejor flujo vial, pueda ser que el congestionamiento vehicular fuera menos y principalmente eliminar un poco el exceso de transporte publico y taxis que son prácticamente los dueños de las calles y con todo el apoyo de las autoridades de tránsito, pues en muchas escuelas como el Colegio La Salle, ubica en la colonia del mismo nombre, para custodiar la salida de los estudiantes de esa escuela, existen tres agentes de Tránsito asi como una patrulla permanente tanto a la salida como en la entrada de los jóvenes, mientras que otras escuelas los jóvenes tienen que “torerar” las unidades que viajan a toda velocidad como es la zona del COBACH 13, la secundaria 73, el cobach 33, la Pablo Guardado Chávez, y gran infinidad de escuelas de esa zona donde hay ausencia total de agentes.



AHORA EL CHISTE SOBRE LAS EQUIVOCACIONES.
Se encuentran dos amigos, después de años de no verse, lógicamente, les da un gustazo enorme y comienzan a recordar tiempos pasados.
Le dice Pedro a Alberto:
-Oye, Alberto, ¿te acuerdas de aquella muchacha preciosa, que estaba con nosotros en la Prepa?
-¿¿Cuál de todas??
-¿Aquella muchacha que se llamaba Lupita, chaparrita, con muy buen cuerpo, con unas grandes..., con un pelo negrísimo, tenía unos ojazos negros, grandotes...
Que por cierto, me daba de su lunch, de su refresco...y me daba hasta las... nalgas, en la Prepa.
¡Acuérdate! Le contesta Alberto:
-Mmmm... Sí me acuerdo, me casé con ella.
-Dice Pedro:
-Bueno, en la Prepa me daba hasta las nalgas, pero ahora ya me ha de dar como por el hombro; me imagino que ya creció. ¿O no???
Así es que cuando platique las experiencias, investigue si no hay algo de ello.
Luego nos chateamos. Criticas, quejas, y hasta mentadas de madre, las recibo en mi correo: angelcarrillob@hotmail.com y si quiere visitarme en la red a chisperoplitico.blogspot.com o a mi celular 9611504393