AUTORIDADES DEL TRABAJO EN CHIAPAS, PASAN DE DESCARADOS A CINICOS
Luego de anunciar que este año, o mejor dicho en lo que resta del año, harán conjuntamente un promedio de mil 103 inspecciones a igual número de establecimientos laborales, el delegado de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) en la entidad, Yamil Melgar Bravo, dijo que las inspecciones se harán de manera aleatoria y estarán dirigidas a vigilar aspectos como el pago de aguinaldo, salario mínimo, reparto de utilidades, inscripción al INFONAVIT, aspectos por lo que más demandas hay ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje. Realmente este sujeto de nombre Yamil y sus comparsas del mismo rubro, aparte de ser desvergonzados pasan a ser cínicos de corazón. Afirmar lo que dice el señor Yamiel, realmente equivale a decir que cuando es de día es de noche o viceversa; todos de antemano sabemos que los comercios en Tuxtla Gutiérrez y en sus ciudades importantes, utilizan a personas para que les trabajen por “destajo”, es decir, si venden ganan y si no, pues realmente en vez de ganar salen perdiendo, ya que ellos tienen que pagar sus pasajes de su propia bolsa; es decir, ni siquiera tienen salario mínimo y ya para qué diablos hablamos de las demás prestaciones que las leyes laborales señalan al respecto. Cuando escuchamos declaraciones tan cínicas y desvergonzadas, se nos viene a la mente tantísimas injusticias que se cometen en el campo laboral, mismas que toleradas, reforzadas, ignoradas, solapadas y hasta ayudadas jurídicamente por las mismas autoridades se acrecientan de forma superlativa. Por lo menos en las ciudades importantes de Chiapas, las personas que prestan sus servicios a cambio de miserias o al “destajo” o por comisiones, como usualmente es conocido, están dentro de gente que puede ayudarles pero el infortunio jurídico y el estado de indefensión es total para los trabajadores del campo, mismos que aparte de tener bajo o nulo nivel de escolaridad, no existe nadie que los oriente o asesore y sobre todo porque viven en la plena esclavitud moderna, pues ellos no saben cuánto les toca de aguinaldo y menos que hayan escuchado eso de reparto de utilidades y es posible que hasta muchos caciques y rancheros, analfabetas también, sepan que sus trabajadores tienen derecho a esas prestaciones. Dios mío, es una catástrofe para los pobres trabajadores, ellos sí realmente necesitan del apoyo del gobierno o de un grupo de abogados que les orienten sobre aquellos derechos que para muchos de esos trabajadores, no saben que existen a su favor. Por ello, me atrevo a decir y a sostener que esas autoridades del trabajo son cínicas y descaradas y sobre todo a hablar de reparto de utilidades en el campo. ¡Por favor, hay que ser estúpido pero no hay que abusar!

AH CALORES INFERNALES ¿ Y QUÉ TAL SIN AGUA?
Yo siento que una de las obras más apremiantes que Juan Sabines Guerrero hiciera como alcalde de Tuxtla es haber modernizado el Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado. En años anteriores, la ciudadanía capitalina por estas fechas ya estaba comprando sus pipas de agua sucia para subsistir del vital líquido, así que los piperos tenían uno de los negocios más redituables y eso provocó que gran cantidad de terrenos cercanos al río Sabinal se hicieran cientos de agujeros, mejor conocidos como pozos artesianos de donde extraía y se sigue extrayendo cientos de miles de litros de agua diario; agua por cierto que tiene una gran contaminación capaz de provocar enfermedades de cura irreversible. En la actualidad, son muy escasas las colonias donde el agua no llega, quizá porque no fueron contempladas dentro de los polígonos contemplados dentro del fundo legal de Tuxtla. Hoy la gente se da el lujo de tener agua permanente, tal como decían aquellos anuncios publicitarios de los que el propio Sabines fue objeto de críticas cuando estaba iniciando su campaña para gobernador de la entidad. Hay otras obras de envergadura notable pero para los capitalinos podría decirse que es la que nos permite estar jactanciosos; hoy en Tuxtla no se habla de agua y menos de su escasez, los capitalinos pueden bañarse a todas horas del día sin tener que estar midiendo o racionando en producto. Desafortunadamente durante el gobierno municipal de Jaime Valls Esponda, el municipio ha quedado olvidado y para lo único que ha servido el hijo del ministro es para meter sus negocios en el ayuntamiento que en mala hora preside, así como para incrementar el precio de las tarifas de agua, para desgraciar la ciudad colocando bolas, topes y hacer así un tráfico lento y arruinante para los vehículos, a la mejor ya el hijo del ministro o el ministro mismo establecieron refaccionarias en Tuxtla donde seguramente venderán suspensiones, rotulas, muelles y todo esas cosas pues los vehículos que circulan en Tuxtla, los que no caen en zanjas, lo hacen en baches, los que no también en topes o bolas que realmente mantienen los vehículos totalmente desgraciados. Ahora si como dijera Ángel Mario Ksherato Flores en su columna de “Fichero Político” de que “no se le vaya a ocurrir a algún atarantado aspirante a la alcaldía de Tuxtla decir que “seguirá la política de trabajo de su sucesor” pues de lo contrario, con esa frase estaría cavando su misma tumba política, ya que Valls Esponda, dejará a los tuxtlecos un mal sabor de boca, calles despedazadas, bolas y topes por donde quiera, pero eso sí; se irá cargado o forrado de billetes gracias a que en Chiapas, es el jardín de Edén de cualquier rata que venga como político, es pues la tierra y el bastión de México de las impunidades, sino me lo creen, solamente contéstenme ¿dónde diablos están los 11 mil millones de pesos que era para la reconstrucción del Stan y que Pablo Salazar se clavó?
Lo invito a que me lea a través de chisperopolitico.blogspot.com o en los periódicos que publican esta columna; las mentadas las recibo en angelcarrillob@hotmail.com o en angelcarrillob@gmail.com o en cabaang@hotmail.com bye.