LAS REFORMAS REELECTIVAS DE CALDERON Y SU SEGUNDA VUELTA
El anuncio de Felipe Calderón Hinojosa hecho por la mañana de ayer en el sentido de reelección por segunda vuelta, causó revuelo en la sociedad mexicana, pero sobre todo a los políticos que están haciendo cola desde hace muchos ayeres y que al no dejar las sillas que anhelan, podrían incluso frustrárseles sus intenciones o inclusive, hasta morir con ese deseo. El caso es que el presidente de México, de acuerdo con la versión de los medios nacionales, no plantea una segunda vuelta como la que conocemos que es volver a las votaciones por segunda vez hasta hallar más del 50 por ciento de los votantes inscritos en el padrón electoral, sino segunda vuelta de estar en el cargo y eso realmente hace obscura la situación política de México. De paso, Calderón habla de reelección para los alcaldes, jefes delegacionales y legisladores (entendiéndose por tales a senadores y diputados federales y locales así como asambleístas). Yo insisto que la reelección de esos cargos no es mala siempre y cuando sean sujetas a la confirmación del cargo a través de un referéndum o plebiscito que es donde los electores los vuelven a legitimar en el cargo en honor a sus méritos de gestoría o trabajo a favor de la colectividad, pero creo que todos rechazarían que por decisión de una ley, los señores vuelvan a reelegirse pues eso realmente los coloca como senadores, diputados, alcaldes o lo que quiera, pero de forma legal más no de manera legítima, pues no hay que olvidar que es el pueblo y no las leyes las que legitiman las acciones que se hacen sobre y para los hombres; las leyes solamente son instrumentos normativos, por lo cual, todo aquel funcionario de elección popular que no alcanza por lo menos el 75% del consenso de los electores, podría decírsele que es legal pero jamás legítimo y si se mantiene es simpatía avalado por su trabajo, puede decirse que es realmente un sujeto digno de crédito y que merece mantenerse en el poder para bien del pueblo pero siempre y cuando haya pues el consenso que debe ser permeado a través de una figura jurídica que es el referéndum. En su anhelada reforma política que Calderón propondrá a los legisladores en los próximos días, propone que en vez de 128 senadores sean 96, o sea 3 por cada entidad federada y que en vez de 500 diputados sean 380, 240 de ellos por mayoría relativa y 140 por mayoría proporcional. Aquí, Calderón, nuevamente omite y elude el clamor popular o desprecio de todos los mexicanos por el derroche de dinero para seguir manteniendo a los plurinominales, mismos que han procurado la partidocracia y que son lacayos de los dueños de los partidos y del mismo presidente; aquí lo prudente es que en la cámara se diputados y senadores, solamente deben estar los que fueron votados en las urnas y no los que pagaron o pagan y seguirán pagando buenas sumas a los dueños de los partidos para llegar a ese cargo o que incluso, muchos de esos plurinominales, venden, hipotecan su dignidad y la de sus familias para ocupar esos lugares. México no tiene una economía boyante ni está en tiempos de bonanza para darse el lujo de costear a tanto holgazán plurinominal, mismos que aparte de considerarse una pesada carga para el presupuesto nacional, son la vergüenza de un país, pues la mayoría de esas personas llegan al cargo no porque tengan deseos o capacidad sino por satisfacer mezquinos intereses de grupo y personales. Pero eso de la reelección decía casi al inicio de esta columna, traerá ciertos problemas o disgustos con los que desde hace años esperan “cola” para montarse en el macho de la política, sobre todo en los partidos viejos como el PAN, PRI y PRD, pero hay que reconocer que esos partidos están sobresaturados de zánganos y dinosaurios políticos que ya son considera, de los que están dos en esos escaños como verdaderas “vacas sagradas” y que ahora les llaman consejeros de los cuales nuevos políticos están hartos. En fin, es recomendable una segunda vuelta, pero segunda vuelta de votaciones para que esos políticos aprendan a tener la legalidad y la legitimidad y se sometan al referéndum para que confirmen su simpatía de aquel pueblo que los confirmará los rechazará, pues de lo contrario, todo será basura despreciable.

UNIVERSIDAD EN PELIGRO
La Universidad Indígena de Chiapas, que hace algunos años fue anunciada e inaugurada con bombo, fanfarrias y platillos, es casi inminente su desaparición o en su caso su privatización, por lo pronto, en el presente semestre, ya no abrió sus puertas a nuevo ingreso, solamente se quedó con los pocos alumnos que cursan algunas carreras, triste es pues que a los indígenas se les cierre las puertas y además hay que reconocer que en Chiapas, la demanda de jóvenes de bachillerato solamente alcanzan a cubrirla en un 40%, según datos oficiales y el resto es carne de presidio de las universidades privadas que han hecho de la necesidad de los estudiantes, un verdadero lucro, sobre todo en algunas universidades como la UVG,SALAZAR, UVM, TECNOLOGICO DE MONTERRERY y otras donde al parecer recibieran clases de oro y con docentes ejemplares, cuando sabemos que la mayoría de la planta de maestros, casi todos tienen únicamente su licenciatura y otros solamente poseen la pasantía de grado. Por lo pronto, la Universidad Tecnológica de la Selva, al parecer corre el mismo riesgo, solamente que ésta es por falta de alumnos y la Universidad Indígena es por falta de presupuesto, recurso que se le ha negado. En Chiapas, el tecnológico de Cintalapa podría tener serios problemas ya que el recientemente creado en Ortiz Rubio, en el municipio de Jiquipilas, le hará la competencia, desleal si usted quiere, pero al parecer, existe una planeación educativa extremadamente delicada y peligrosa que vendrá a dar al traste con algunas instituciones, pues crean escuelas donde no deben crearse y dejan sin escuelas a áreas completas, pues por ejemplo en la región de la frontera y sierra, no existe una sola institución superior oficial, a excepción de Comalapa que existe una escuela superior “patito” pero puede afirmarse que desde Comitán hasta Huixtla o mejor dicho Tapachula, no hay una que acoja a por lo menos, unos 10 mil jóvenes que egresan de las instituciones de educación media cada año. Cabe mencionar que de Comitán hasta Huixtla existe gran cantidad de municipios en donde sí faltan escuelas secundarias, primarias y, obviamente, nunca han tenido, no tienen y posiblemente ni tendrán una institución de educación superior. Por ello es lamentable que mientras en algunos lugares algunas universidades tiendan a cerrarse por mala planeación, en otros se están necesitando aulas superior, pues sería conveniente que como en el caso de la UNICH, en vez de cerrarse sea trasladada a la zona sierra, donde realmente sería una verdadera bendición social, bendición social que esos municipios no ven, ni verán, por lo menos en muchos años más.