tienen escrúpulos para criticar los troncos que tienen en los suyos. Es despreciable la actitud que asumieran el pasado martes y jueves un grupo de senadores panistas se pronunciaron por la violencia que prevalece en Venezuela donde la lista de muertos no es escandalosa a pesar que el imperio norteamericano está descaradamente interviniendo. Pero el caso de los senadores mexicanos, no se sabe si ya perdieron la vergüenza, son nefastos o sencillamente sufren amnesia ya que si comparamos los más de 140 mil muertos y 80 mil desaparecidos durante el gobierno panista de Felipe Calderón en su guerra contra el narcotráfico, los muertos que han habido en Venezuela, podríamos decir que es una sola manchita del leopardo. Si nos vamos a comparar con las atrocidades que ha cometido el gobierno de Washington en Irak, Afganistán y otros, el número de afectados en Venezuela casi se queda extremadamente minúsculo, sumado a estos problemas, el gobierno de México, creo que no le conviene ni siquiera abrir la boca, pues desde 1994, tiene un ejército clandestino en el sur de México, Chiapas concretamente, que no ha sido resuelto y de paso tiene una guerra civil en el occidente, en el Estado de Michoacán y podríamos sumarle la masacre contra periodistas y otros y si hablamos de Estados Unidos, no podría eludirse sus grupos clandestinos compuesto por veteranos de guerra que se encargan de asesinar a migrantes latinoamericanos en la frontera sur de aquel país y hay que agregarle que periódicamente existen masacres en las escuelas. En ambos casos hay manifiestas e impunes violaciones de los derechos humanos, sólo que los parlamentaristas de ambos países sesgan la cara para el gobierno o país incómodo solamente porque no coincide con su modo de producción: el capitalismo. Los panistas tienen memoria amnésica y cínica y de paso los parlamentarios priístas que también aplaudieron el cinismo de sus colegas panistas, habría que recordárseles las matanzas del 68 y la Guerra Sucia en Guerrero y otras tantas o quizá el asesinato descarado de Luis Donaldo Colosio Murrieta de los que hasta la fecha, nadie está purgando sentencia alguna. Si esas acciones no son violaciones de los derechos humanos, cabría preguntarse, ¿Qué son violaciones de derechos humanos? Es necesario que se ejerza el derecho de libre autodeterminación de los pueblos en el que sean libres de decidir su desarrollo, económico, político y cultural sin las injerencias externas de metiches como lo reza la Carta de Naciones Unidas, pero sin embargo, no faltan metiches que asoman y hasta meten las narices donde no los llaman, como los panistas o los gringos que están en todo, menos en misa, siempre buscando desgraciar la vida de los pueblos para adueñarse de su patrimonio económico. Seguramente el gobierno norteamericano estará frotándose las manos para poder contar con el segundo país petrolero de América, ya que el primero que es México fue entregado por el gobierno de Enrique Peña y sus gañanes, conocidos como parlamentarios. Es falsa la idea que le venden los gringos a los hombres que radican en los pueblos de economías socialistas en el sentido que los norteamericanos son fieles protectores de los derechos humanos y sólo habría que preguntarse ¿qué le interesaría a Obama la vida de Pedro Cuevas de origen venezolano radicado en aquella nación?, nada, en absoluto nada.