MIGUEL ANGEL CARRILLO BARRIOS

Al anunciar Vladimir Putin, primer ministro Soviético, la venta de poderosas armas a Venezuela, podría recordarse aquellos aciagos años en que las fuerzas bipolares amenazaban al mundo con una tercera Guerra Mundial, que a juicio de los sabios, no será de esa manera sino ecológica, cibernética y de otros asuntos más avanzadas, a Estados Unidos sí le preocupa que un gobierno de tintes socialistas como el de Hugo Chávez Frías, posea esas armas que podrían estar a la expectativa ante cualquier eventualidad que se presente. Hay que recordar que hace algunos años, concretamente en los años 60s, el problema era la Isla del gobierno de Fidel Castro, pero todo pareciera que ahora, la Isla ha quedado en segundo término y la preocupación es Venezuela y otros países de origen centro y sudamericanos que han puesto su marcado descontento contra el canibalismo aniquilador del capitalismo inhumano que mantiene al mundo, hundido en la miseria extrema, mientras que algunos países se pudren en dinero. Hoy vemos con tristeza que ha sido el gobierno de Washington quien ha propiciado a pasos acelerados, que muchos países se salgan de su control comercial y muy a pesar de lo que se diga, ningún país es potencia comercial como lo es Estados Unidos en América Latina. Podemos decir que el colonialismo norteamericano mantiene aniquilado a cientos de países y a la vieja usanza de los romanos o los franceses en la época medieval, hoy las cosas ya no serán lo mismo, pues hay pueblos y naciones enteras que se debaten en la miseria, como lo son las naciones centroamericanas en donde realmente, es escalofriante saber que a diario se mueren cientos de personas, algunos por hambre y la mayoría por la pobreza ultra extrema en la que se debaten. De antemano, el capitalismo creo que ha llegado a máximo nivel y posteriormente tendremos que observar que, la vértice irá en descenso y gracias a un evolucionismo natural al que todo fenómeno natural o social tiende a dar.

Luego que la contraloría, ante una andanada de denuncias que hicieran afectados por lo del desborde del Sabinal y por la mala acción de los programas “Motor”, iniciara una auditoría, detectó que el problema es más grave de los que se pensaba y de lo que realmente se denunció. Resulta que los señores encargados de los programas motor, hicieron lo que quisieron ignorando determinantemente las instrucciones del gobernador del Estado y los lineamientos legales e institucionales con los que debían darse. Al parecer, luego de habérseles comprobado las irregularidades, los señores de la delegación regional de Chiapas Solidario, ya se les notificó las irregularidades y podrían enfrentar un juicio penal y de responsabilidades a la vez, pues se confirma que los programas motor sirvió para beneficiar a sus familiares y amigos ignorando que eran para las personas que verdaderamente generaran empleos. Habría que agregar aquí que otro personaje que no se menciona pero que debería incluirse dentro del desfalco a Chiapas Solidario, es el alcalde Electo de Soyaló, Noé Morales, quien realmente tuvo la osadía de adjudicarse programas motor para él, para su esposa y para su sirvienta; pues todavía los vecinos de Noé Morales se preguntan de dónde salió los ranchos que adquirió, así como las papelerías y un ciber con buena cantidad de máquinas que aparecieron en ese negocio de la noche a la mañana. Es el caso es que si la contraloría sigue hurgando en esa Chiapas Solidario, sería bueno que se percatara sobre las millonarias compras de lonas, la compra de folletos y otros negocios que se hacían o hacen entre el administrador de la institución y un impresor que tiene su negocio en el barrio Niño de Atocha, en donde un trabajador de la misma empresa llegaba con grandes fajos de billetes para entregárselos a funcionario a cambio de adjudicarles trabajos de muy mala calidad pero que se cobraron de primera que cuyos precios eran irrisorios pero que la institución los sobre pago en total contubernio con el dueño de la impresora y los funcionarios.

A casi 13 años de haberse suscitado aquella feroz masacre de Acteal donde fueron sacrificados a mansalva más de 45 indígenas en la comunidad de Acteal, municipio de Chenaló, 35 de los 95 privados de su libertad, siguen pagando una condena que no deben, condena que es de 35 años y medio. Hay que recordar que en aquel entonces las autoridades del gobierno del Estado mandaron a llamar a esos indígenas a palacio de gobierno con la finalidad de que debían declarar sobre los hechos para hallar y reconocer los culpables, pero grandes fue su sorpresa cuando, ya estando los indígenas sentaditos en los pasillos de gobierno, llegó la policía y sin decir motivo alguno, todos los subieron a un camión y ser llevados al penal donde actualmente cumplen una injusta sanción o sentencia. A los indígenas ni siquiera se les había instruido el inicio de averiguación previa y menos que hubiera por ende, orden de aprehensión, pero como al gobernador de ese entonces le interesaba que pagaran quien fuera aunque no la debiera, fueron los indígenas que les echaron la culpa. Muchos de ellos ( 60%) no saben hablar español, así es que cuando les preguntaban si habían matado, posiblemente dijeron que sí pues no sabían de qué se les inquiría, violentando con ello, los más elementales principios de la Carta de la ONU, los principios doctrinarios del derecho mexicano y la propia Constitución mexicana y los tratados internacionales. E los asesinos intelectuales y materiales, todos está afuera, gozando de actitud asesina, pero sobre todo los gobernantes de aquella época quienes todavía tuvieron el cinismo de robarle a Chiapas y de paso, mandar asesinar a sus indios. Los asesinos materiales, de los que se sabe a voces, por allí están, algunos dentro de la policía y otros en plena libertad. Por lo pronto y gracias a la Suprema Corte de Justicia que atrajo algunos expedientes y que debería atraerlos todos, muchos ya lograron su libertad y es posible que con los elementos del estado de indefensión en que fueron encarcelados y detenidos, lo más pronto posible sean liberados, pero debería haber leyes que sancionen a esos agentes ministeriales y jueces que por su ineptitud y servilismo, condenan a inocentes aun no teniendo los elementos necesarios y legales para poder hacer infeliz y desgraciarles la vida y la reputación a tantos inocentes que, no deben quedarse con un “usted disculpe”.

Luego nos chatearemos en la próxima edición.

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